Vivero Forestal-Cerro de Las Columnas-Senda del Ismael-Cueva Oculta-Centro de Recuperación de Fauna Silvestre

Accedemos desde la Alberca a la carretera del Valle Perdido, rodeando el Vivero Forestal, productor anual de 2.500 árboles de navidad del Pino de Calabria (Pinus eldarica), Pino Carrasco (Pinus halepensis) y Ciprés Común.



Aparcamos pasado el Vivero antes de cruzar el puente.

Salimos por sendero hacia las Canteras, vamos junto a un ramblizo por un pinar de reforestación, son usados mayormente el pino carrasco (P. halepensis) y el pino resinero (P. pinaster), al ser especies de rápido crecimiento y resistentes a la sequía, evitan efectos erosivos y son económicamente muy rentables en el sector maderero.

Tomando hacia nuestra izquierda en vez de cruzar el ramblizo, enlazamos con la pista del Centro Ecuestre;



la seguimos unos metros, para salirnos a la izquierda en subida por sendero con suelo de roca, algún hoyo y surcos artificiales,





aquí predomina el espino negro (Rhamnus lycioides).

Salimos al Sendero del Cerro de Las Columnas. En las Canteras, dejamos el entronque con la pista al centro Ecuestre y Valle Perdido,







aquí el sendero efectúa un giro brusco, cambiando de dirección hacia la zona de escalada;





avanzamos en continuo ascenso, realizando tornantes reforzadas con vallas de madera y vistas del Parque Regional de El Valle.





Pasamos un falso llano



y un derrumbe,

entrando en zona boscosa de pinos carrascos, vemos una zona arbustiva con espinos, enebros, lentiscos y bayones; bordeamos el Cerro de las Columnas (409 m),



el sendero se retuerce cercano a su final.



Salimos a la pista ancha hacia el Collado de la Piedra; a pocos metros, iniciamos a nuestra izquierda, el descenso por otra en desuso flanqueada por cipreses;



se convierte en sendero revirado





hasta que conecta con la Senda del Ismael.

Continuamos en pronunciado descenso;



al cruzar un ramblizo vamos atentos, para girar en subida por una traza senderil






hacia Cueva Oculta,



una covacha con abertura de salida en su zona alta;



de paredes tiznadas, manchas de musgo y desprendimiento rocoso interno;



sus medidas, siendo modestas, nos permiten descansar un rato al fresco.

Volvemos sobre nuestros pasos de vuelta, siguiendo el trazado de la Senda del Ismael.





Nos acercamos a su salida, cuando dejamos atrás los restos de una camioneta en una yesera;



proseguimos por la Rambla del Valle, donde hay una rueda de molino a medio extraer,







salimos junto al Albergue Juvenil



continuando por sendero junto al asfalto,







dejamos atrás el arco del acueducto sobre la Rambla de El Valle rodeados de eucaliptos,



enlazamos con la pista que desciende entre las verjas del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre, en funcionamiento desde el año 1984, desempeña trabajos de investigación, recuperación y rehabilitación de especies de fauna silvestre.



El equipo atiende cada año una media de 1.500 animales, ingresados por muy diversas causas (heridas, enfermedades, expolio, electrocución, atropellos, etc.). Muchos de ellos sanan pronto y son devueltos a su medio natural y algunos de los que no consiguen recuperarse totalmente, son acogidos en el Área de Educación Ambiental.

Caminamos por la pista





hasta la balsa rodeada de trepadoras, con un canalillo de agua,





junto al cual se halla la senda



que nos conduce a un entorno de recientes charcas, cuya finalidad es mejorar la vida de los anfibios, ya que podrán realizar en ellas sus puestas de huevos, pero también como bebederos para otros animales.



Solo queda cruzar la pista del Centro Ecuestre para llegar a la salida y degustar un buen aperitivo, como es nuestra sana costumbre.

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Versión Patas Inquietas