Salida del grupo Andarines desde el Kiosko-Bar del Valle Perdido...
... en una mañana de primavera que se torna otoñal, guiados por Joaquín emprendemos continuas subidas...
... con el el Centro Ecuestre y Las Canteras a nuestra izquierda y el nacimiento de la Rambla Paciencia a la derecha.
Se agrava el ascenso ralentizando la marcha...
... una vez arriba se prodigan las vistas de las nubes que nos vienen a buscar desde el pico Relojero.
La humedad ambiental nos hace sudar más de lo habitual, echamos de menos las cervecitas frescas...
... sin embargo será agua en forma de calabobos lo que tendremos en el descenso por la Senda Perdida, que pasa por Peñas Negras y corta la Rambla de Las Cabezas, justo aquí hacemos un alto para tomar un mantente, y ponernos los chubasqueros ante la persistente llovizna.
El paso por la Rambla de Las Cabezas se encuentra obstaculizado por los numerosos árboles caídos, la constante vegetación a base de pino y matorral ...
... el metro de profundidad que mantiene su lecho en algunos tramos...
... unido a su escasa difusión como paso senderista hace que la marcha sea ardua.
En un momento llegamos al “Tres R “ (rinconcito rocoso rampero)...
... sencillamente espectacular con agua...
color ...
y perspectiva
... una vez más hay que darle las gracias a Joaquín por mostrarnos los tesoros escondidos, de su Valle Perdido.
En una clara bifurcación,
nos salimos de la Rambla de Las Cabezas por un ramblizo a su derecha, en busca
de la Pista de las Canteras, la seguimos optando por la izquierda en el cruce
con las Canteras del Feo, pasando por el Collado de La Piedra, donde se halla
el “monolito”, continuamos por pista ...
... hacia el descenso por el Cerro de Las Columnas, no sin antes ver dos rocas con petroglifos.
Una vez en el Kiosko-bar recuperamos líquidos y, tan frescos como satisfechos...
... quedamos emplazados para la siguiente ruta.
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Versión Patas Inquietas
... hacia el descenso por el Cerro de Las Columnas, no sin antes ver dos rocas con petroglifos.
Una vez en el Kiosko-bar recuperamos líquidos y, tan frescos como satisfechos...
... quedamos emplazados para la siguiente ruta.
Versión Patas Inquietas
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