Nueva de Llanes-Garaña-Bufones de Pría-Pozo de las Grallas-Camino de Espines-Playa de Cuevas del Mar-Estación de Nueva
Salgo pedaleando hacia la costa,
en el Puente del Tropezón
(segundo puente) sobre el Río Ereba,
giro a la izquierda en ascenso pasando por
Villanueva de Pría;
tomo dirección L´Oteru
por pista entre ganado caballar;
dejo atrás el área recreativa rodeando el Camping Palacio de Garaña;
en la
bifurcación de Llames,
sigo por la derecha hacia Los Bufones de Pría; los
carteles me guían en todo momento.
El Río Guadamía aparece por mi izquierda,
para seguirlo en paralelo
por el Rozo las Grallas, donde se encuentran los Bufones de Pría.
Los bufones
son formaciones kársticas, originados por el efecto de la erosión del mar y la
lluvia en la roca caliza, dando lugar a grietas y chimeneas que conectan el mar
con la superficie de la tierra.
El oleaje contra los acantilados provoca la
expulsión del aire comprimido en las galerías, en días de fuerte marejada, aire
y agua escapan a gran presión con chorros de agua pulverizada, emitiendo un
sonido característico denominado bufón.
La columna de agua puede alcanzar más
de 10 metros de altura y el bufido se oye a varios kilómetros. Me acerco a investigar la agrupación de bufones, en uno de
ellos, sí que asusta el rugido y aire a presión al acercarme,
teniendo en
cuenta que la mar se halla casi calmada, que no será con tormenta.
Disfruto de
las vistas desde los altos acantilados,
tengo que bajarme de la bici en varias
ocasiones,
el sendero es irregular y el matorral tapa agujeros y rocas por
igual. Se despeja el camino un tanto,
bordeando entrantes de mar
que penetran
bajo los acantilados, creando paisajes de ensueño
como el Pozo de las Grallas.
El sendero arbustivo
desemboca en la pista del Camino de
Espines;
a la entrada de El Cuetu, hago una breve parada para recrearme con su
balsa y fuente.
Cruzo por El Pandu;
sigo junto al Río Millares;
cambio de
dirección a la entrada de la “playa del canal”; sin entrar en Villanueva de Pría,
giro a la izquierda por una pista arbolada;
paso un pequeño cercado con caballos,
una casa abandonada con
hórreo
y cruzo el puente de madera sobre el Río Ereba,
mas adelante se filtra a
través de una pared rocosa.
En la carretera, por la derecha primero y la izquierda
después, tras el túnel horadado en roca,
aparece la bella Playa de Cuevas del Mar
con formaciones rocosas espectaculares.
En La Cabaña la pista aparece asfaltada,
a lo lejos se distingue la Ermita de San Antonio;
tuerzo a la izquierda cruzando
las aldeas de Picones y Ovio.
Desde El Acebo
y La Vega, bajo la Autovía del Cantábrico,
sigo el trazado del ferrocarril
a la Estación de Nueva,
entrando en la
población con casas de indianos (Villa Concha),
y el restaurante Bar Central donde
comimos bien.
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