Valle Perdido-Subida al Cerro de Cueva Colorada-Torre Isabel

Salida del grupo Andarines desde el Kiosko-Bar del Valle Perdido ...

... aprovechando una agradable mañana otoñal y con un Joaquín inspirado, nos encaminamos por trochas entre ramblizos, buscando objetivos sorprendentes e inusitados en apartados rincones.

Nos dirigimos hacia Las Canteras, cogiendo sendero al pie de la zona de trincheras de la Guerra Civil, de haber venido Isidoro, estaríamos informados de los pormenores que las circundan.

Trincheras de la Guerra Civil

Ascendemos cerca de una pared de arenisca con vistas de “La Tubería”.

“La Tubería”

Acometemos intuitivamente la subida al Cerro de Cueva Colorada (277 m)...

... será de escasa altura pero cuesta sudar el encumbrarlo, una vez arriba se prodigan las vistas de la vega huertana y la ciudad de Murcia.

Cerro de Cueva Colorada

Empleando la misma técnica que en el ascenso, lo hacemos de bajada...

... es decir, con mucha precaución, buscando zonas del terreno con pendientes suaves y despejadas de maleza.

Pequeña cantera

Nos topamos con una pequeña cantera antes de salir a una pista encontradiza en la Rambla Paciencia.

Hoy el espíritu del grupo pide monte a través, donde se hallan los musgos, las setas, las aguas recónditas y algún fósil.

De todo eso hay en esta ruta laberíntica, nunca el gps tuvo más trabajo, enlazando y trazando como si fuese uno más de nosotros nueve.

Acabamos de tomar pista y ya la abandonamos enfrente, por sendero espeso ...

... que nos conduce a un nacimiento de agua enmarañado...

Nacimiento de agua

... donde tomamos el mantente, algunos también el “sustente” apalancados junto al tronco de un árbol caído. La bota de vino hace corro, las risas también.

Continuamos remontando ...

Rogelio buscando Níscalos

... hasta entroncar con una pista, la dejamos por la derecha siguiendo por un ramblizo...

... para atajar en fuerte subida por la derecha, llegarnos a una pared erosionada alveolarmente ...

"El Espinazo"

... que presenta la peculiaridad, de tener varias conchas de molusco incrustadas o semienterradas entre sus oquedades, una de ellas bien grande y casi completa a la vista.

"La Chapina"

Entre el regocijo general por el hallazgo...

... toca ir volviendo por la zona de Torre Isabel, donde encontramos una canalización y embalsamiento de aguas en su alberca correspondiente, así como un aljibe abandonado.

Proseguimos por un sendero invadido por la vegetación, que da cobijo a multitud de setas de buen tamaño ...

... y a la salida una telaraña inmensa sin inquilina.

Tomamos pista para salirnos en una curva y volver a lo nuestro… monte a través y bajando a los ramblizos más cercanos...

... para seguirlos en la orientación que marcan nuestros deseos de birras y pasto seco. El peso de una gran escoba de bruja hace combar la rama del pino que la sustenta, como si de una enorme mochila se tratase.