... pasamos La Rambleta, dejamos por la
derecha el Cortijo de La Almazara con aljibe...
... por la izquierda el Cortijo Santa Clara con una alberca circular...
... llegamos a Casa de Las Monjas...
... y tomamos la Rambla de La Murta.
Enlazamos con una pista de repechos que nos sacan los
colores y las barritas energéticas.
Nos desviamos por sendero a la izquierda y
entroncamos con otro en mejor estado, conocido de la bici...
... que proviene de la
pista de Corvera a la finca Caserío de la Naveta del Salar, que avistamos
después con un espléndido campo de avena.
Vamos bordeando un cortado semicircular con preciosas vistas
del Campo de Cartagena...
... el sendero desemboca en una pista que acaba poco más
adelante, nosotros volvemos a coger enseguida senda de firme irregular y con altibajos...
... para descender
por la ladera del Morro de la Palma (732 m) a las Casas de Los Monreales, con
tramos de sombra y pinos perjudicados por la sequía y las procesionarias.
Ya por pista dejamos dos ruinas, la segunda con chimenea de
fundición, posiblemente trabajaron con mineral de hierro (piritas) y después
por asfalto (Camino-Sierra) llegamos a la salida.
En La Murta cumplimos con el debido protocolo probando el pan y los embutidos, todo ello regado con cerveza fresquita.
“Para vivir así … no hace falta morirse”.
Versión Patas Inquietas
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